La familia es un lugar privilegiado para desarrollar ideas que tengan que ver con las matemáticas.


En la familia entramos en contacto con el mundo y vamos aprendiendo a conocerlo.


Contar, ordenar, ver la forma de los objetos, desplazarse por el espacio de la casa son actividades que pueden ayudar a construir fácilmente conceptos e ideas abstractas.


Durante esta cuarentena hemos practicado mucho y aquí tenéis alguno de los resultados: